Cuando tu voz interior es más fuerte que el ruido que hay en tu exterior tu vida empieza a tomar la dirección que quieres y encuentras La Paz Interior
Tu estás al mando, tu decides.
No lo decide el vecino que dejó escapar su perro y se cagó en tu jardín…
…ni tampoco el político corrupto, ni tu esposo infiel, tampoco la muerte de un ser querido.
TU DECIDES CÓMO SENTIRTE A CADA MOMENTO DE TU VIDA INDEPENDIENTEMENTE DE LAS PERSONAS Y CIRCUNSTANCIAS.
Solo con esta actitud lograrás La Paz interior.
Esta es la principal diferencia entre una persona re-activa y una persona pro-activa.
La primera reacciona según lo que pase en su exterior: si una persona le grita, ella grita; si se le pincha en carro, grita e insulta al puto destino; si su pareja le es infiel, llora y se hunde en la depresión.
La segunda, en cambio no reacciona sino que ELIJE cómo responder: si alguien le grita, sonríe y comprende que ese enojo es suyo, así que lo deja pasar; si se le pincha la rueda del carro, entiende que los insultos y quejas no la repararán, por lo tanto se pone a pensar en las posibles soluciones; si su pareja le es infiel, puede llorar por la desilusión, pero entiende que esa ilusión la fabricó el mismo, por lo tanto la deshace y entiende que esa persona no era lo que él creía y está bien, las personas son como son no como queremos que sean, suelta y sigue su camino de la mejor manera.
De esta forma, al construir nuestra respuesta a cada evento y persona, construimos nuestro destino.
Aquí te doy una herramienta muy simple para controlar las respuestas que das a tu entorno.
EJERCICIO PRÁCTICO: Haz una respiración profunda mientras te preguntas ¿Que respondería el amor?
Esto hará que te enfoques en lo que realmente importa, tu respuesta a esa situación o evento, a la vez que disminuye tu emoción negativa.
Ponla a prueba y notarás el cambio en el mismo instante.
Si quieres aprender a ser una persona PROACTIVA y dominar tu destino, entonces escríbeme y te envío los detalles de un curso que está mejorando la vida de miles de personas.
Un abrazo grande!
David López Larenas
Dr. en Metafísica, Máster Coach en PNL